Es una proteína intracelular fibrosa que consiste en largas cadenas de péptidos que forman fuertes filamentos y es muy rica en azufre, cuya función es darle fuerza estructural y elasticidad a diferentes tejidos como la piel, las uñas y el cabello; también, se encuentra en las plumas, cuernos, ranfotecas y pezuñas. Asimismo, ayuda a proteger la piel y los tejidos subyacentes del de las abrasiones, el calor, los microorganismos y los compuestos químicos; no obstante, la concentración relativa de queratina aumenta en las células a medida que se alejan de la irrigación sanguínea nutritiva y los orgánulos mueren. Por otro lado, gracias a ella el cabello humano es capaz de soportar temperaturas extremas de calor o frío, la exposición al sol y el calor de las planchas, secadores y rizadores.
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